jueves, 22 de enero de 2009

De cuando conoci al chikillo.

Llegue a Arequipa con la excusa del bautizo de mi sobrino y aunque me moría por verlo,la verdad esa era tan solo una excusa,cuando me comunique con,llamemos le X,le dije que iría hacia allá,cosa que el no creyó por que hace un par de semanas que estuve por ahí,X fue a recogerme al terminal y luego de algunas vueltas nos instalamos en un hotel,en el centro de la ciudad, ya pasado el medio día salimos a dar un paseo,una pequeña caminata y a comer algo,me llevo a un restaurante con vista al río,el lugar era agradable,nos sentamos bajo un árbol y mientras yo trataba de derribar esa mole de cemento que a veces era su corazón,el con mucha tranquilidad y mirándome a los ojos me dijo que yo ya no le importaba,no con esas palabras,pero básicamente lo mismo,que salia con otras y que cuando el quería no solo se las ligaba sino que encima se las llevaba a la cama,sentí un nudo en la garganta,terminamos de comer,una larga caminata nuevamente hacia el hotel,estuvimos juntos...
Eran las 8 de la noche cuando me fui al bar donde el trabajaba ya que de vez en cuando proyectaban películas,me tome unas cuantas cervezas y cuando estaba por retirarme,X me invito a quedarme,los tragos se me subieron pronto,me puse a bailar y así en medio de una noche bastante confusa,conocí a la que hoy es una de mis mejores amigas,Gabriela,ella me presento a unos amigos,entre ellos el chikillo,la verdad es que yo no tenia ganas de ligar con nadie,en toda la tarde no derrame ni una sola lágrima después de lo que el me dijo y en mi oido aun sonaban sus palabras,me sentía sola,poco agraciada y bastante desgraciada,debo admitir,tomamos,tome,el alcohol no solo adormece tus sentidos,también el dolor y mientras bailaba con el chikillo,el me beso,diablos me dije,X esta al otro lado del local,en la barra pensé,el beso me tomo por sorpresa y en un primer impulso lo aleje,que pasa me dijo,conoces a alguien acá?me calle,se volvió a acercar,esta vez ya no sentí miedo,lo bese,me sentí(en esos labios de lujuria,que es como lo suelo llamar,por que conservamos la amistad) bien,me levanto el ego,abrigo mi corazón,como en la canción de Joaquín Sabina pero sobre todo me dio a probar del dulce sabor de la venganza.